“Las tres C del liderazgo son Consideración, Cuidado y Cortesía. Sea educado con todos”. Brian Tracy.
Leyendo el acertado post de www.dialogolaboral.com que versa sobre Tres cualidades para ser un gran líder me surgieron unas cuantas reflexiones acerca del liderazgo que hoy me gustaría compartir con vosotros.
En el citado artículo se menciona como una de las tres grandes cualidades para ser un líder la cercanía, siendo clave para ello el aprovechamiento de los encuentros informales. En mi opinión este es uno de los factores fundamentales, y a la vez síntoma, de la diferenciación entre el líder y el jefe. El jefe mantiene su posición por el contexto, el organigrama o la autoridad que le confiere su puesto, sin embargo el líder no precisa de ese boato para poder tener ascendencia sobre los demás, y aprovecha cualquier situación relajada para seguir orientando al grupo a la consecución de sus objetivos. Ese carisma seductor, casi indescriptible, que se muestra en cada encuentro fomenta la lealtad y el buen clima laboral, citando a Warren Bennis: “La manera de atraer y motivar a las personas determina el éxito del líder.”
Los encuentros informales son además una oportunidad única para la consecución de información que de otro modo quedaría en la sombra. Muchos problemas presentes o futuros son mejor expuestos o intuidos en charlas menos encorsetadas o previstas. No debemos olvidar la cita de John Maxwell “La prueba del líder es la capacidad de reconocer un problema antes de que se convierta en una emergencia”. El conocer de primera mano las inquietudes, anhelos, ambiciones o problemas cotidianos de los colaboradores ayudará de manera decisiva a la buena gobernanza de cualquier equipo de trabajo.
Por último, recalcar otro punto que ya se comenta en el post inspirador de estas líneas. El líder lo es porque predica con el ejemplo y en esa tarea ha de dedicarse 24 horas al día. La coherencia entre su discurso corporativo y sus acciones ha de ser intachable en todo momento, o ello conllevará una brecha inevitable en su credibilidad que es sin duda la mayor fuente de su influencia. ¿Alguien seguiría a un líder en el que no creyese?
No debemos caer en el error de pensar que el tiempo de descanso o relajación dentro del propio centro de trabajo es un tiempo perdido. Como he tratado de detallar, cada momento cuenta a la hora de sacar adelante una empresa conjunta. Sin embargo, tampoco hemos de abusar de estos encuentros informales, ya que dar a entender que el superior es un amigo puede dar lugar a problemas y malos entendidos que deseamos evitar.
Imagen bajo licencia Creative Commons | Pete

¡Enhorabuena José Ángel! Me ha gustado mucho el post, muy acertado. Un cordial saludo.
Muchas gracias Javier. Me alegra que sea de tu agrado.
Saludos
Excelente reflexión. Me ha encantado la frase que parafraseas:La prueba del líder es la capacidad de reconocer un problema antes de que se convierta en una emergencia
Gracias David.
Esa creo que es una de las grandes competencias del líder; saber separar el grano de la paja y darse cuenta de aquellos detalles que realmente importan y que merecen su atención, de esos otros que no son más que contratiempos. Un líder que se anticipa a los acontecimientos es un líder que toma ventaja.